sábado, 22 de diciembre de 2007
Cambio de imagen
El mejor video del año
The hobbit song
Dibujos camuflados
Citroen
La bruja novata
Los mojinos escocios
Monologos de "el sevilla"
El peo
Villancicos
jueves, 20 de diciembre de 2007
Micro rrelatos
También voy a subir mañana unos vídeos de youtube que he encontrado bastante buenos... y eso es todo por ahora, a no ser que termine la dichosa presentación de la teoría y un nuevo fondo que estoy diseñando para blog. Ruego comentéis y critiquéis sin piedad ^^.
Numero 1:
La tierra tiembla… 10000 pies corren a la velocidad del viento. El primer impacto frontal entre las dos masas es devastador, las espadas abren esas inútiles armaduras como nueces.
Mientras tanto, en otro lugar alejado suena un música de trompetas, y un ejército hasta ahora vencido entra en éxtasis. Gritan con los ojos blancos. Ahora no tienen miedo a morir. Sin miedo a morir, son imparables.
Los otros se dispersan, huyen aterrados… son cazados uno a uno. Les arrancan las alas a los prisioneros…
Es un espectáculo hermoso para mí. Desde la muerte del creador, unos años después de dar vida a esa pareja de criaturas bípedas de la tierra, por aquí solo luchan. Por supuesto, la tierra esta ahora sola, y esos seres, la ultima creación, hacen lo propio: pelear. Eso me gusta…
Todos están cayendo… yo fui el primero en caer.
Ese estúpido sofá… siempre se ríe de mí…
Juro que algún día… ¡OH no! ¡Son las 5 de la mañana!, mas vale que me acueste…
Bueno, esperare un rato mas… creo que conspira con el sillón… madre mía.
Las cinco de la mañana y yo aquí en vela, con este hacen ya 5 días sin dormir… y por supuesto 2 días que el sofá conspira contra mí…
numero 3 (premiado):
La mire, me miro, nos miramos. Tras unos instantes decidí acercarme lentamente a ella, que permaneció inmóvil, mirándome, como si de una estatua se tratase…Le susurre palabras tranquilizadoras, parecía nerviosa, aunque yo estaba mas nervioso que ella seguro. La agarré por el dorso, pero ella revolviéndose, luchadora hasta el final logró huir…. Aún tengo gratos recuerdos de las cacerías de lagartijas con mis primos.
Ayer decidí darme un paseo, y poco después de salir me encontré a Alberto:
- Buenas amigo, ¿como te trata la vida?
- Bien.. aunque mañana tengo un examen de los gordos, he salido solo para despejarme…-le contesté.
- ¡Ah! Bien, bien… no te molesto mas pues, y mucha suerte en el!
- ¡Bah, la suerte es para los cobardes!-dije yo en alto- a mi no me hace falta… -y me falto tiempo para añadir en un tono mas reservado- Suerte, por favor, perdóname…
Bueno, yo era un hombre que no amaba los bienes materiales, estos me parecían algo secundario. Entonces los perdí… y con esto perdí también mi postura ante la vida en aquel dichoso incendio. Intentaba siempre actuar con normalidad pues era yo un tipo algo supersticioso, pero en honor a la verdad por dentro estaba hacho añicos… aquel fuego me hizo perder incluso el disco de los Beatles firmado por Ringo…. Bueno, eso se lo hizo perder al mundo entero… Y así reflexionando,.. Llegué de nuevo a mi casa… no quería entrar, estaba casi vacía de pertenencias y me deprimía, así pues decidí alargar mi paseo, y cuando gire la esquina, y debido a mi superstición me decidí a cruzar la calle. Entonces paso… paso un camión por encima mía, quiero decir… eso es todo lo que recuerdo, ¿Puedo entrar ya San Pedro?
miércoles, 12 de diciembre de 2007
Hacerse el loco
El loco tiene el poder, el loco esta libre de todas las represiones sociales, libre de toda culpa, libre de toda responsabilidad... hay cosas que un "cuerdo" no puede decir, pero un loco tiene carta blanca, es libre de hacer y decir lo que quiera; porque esta loco... Creo que es una forma fácil pues, de pasar por la vida el hacerse el loco... pero entonces...¿ Quien es el listo (o mejor dicho el tonto) que se va a quedar como cuerdo para controlarlo todo?... las responsabilidades ni se crean ni se destruyen, solo se transforman o pasan de una persona a otra, y si el loco esta exento de responsabilidad, la responsabilidad que sobre el recaía, habrá de ser repartida entre los cuerdos que quedan... Ante esta perspectiva, no queda mas remedio que afrontar las responsabilidades y dejar la locura para los locos.... ¿o no?............. la ignorancia es la base de la felicidad... eso no debes olvidarlo.
El loco es ignorante, ignorante de la "realidad" que hay a su alrededor (en cuanto a la definición de realidad... eso es otro debate), así pues el loco es mas feliz, ajeno a los problemas existentes, que se reparten los cuerdos como buenamente pueden.
Por eso, para poder hacerse el loco hay que renunciar al conocimiento, en alguna de sus formas, y eso no es nada fácil, pues el conocimiento como nombra Pio Baroja en el Árbol de la ciencia es una droga que corrompe al hombre, y que aunque solo le causa mal, este no esta dispuesto a abandonar....
en mi opinión la locura esta reservada para unos pocos privilegiados dispuestos a sacrificar mucho a cambio de aún más.FIN DE LA TRANSMISIÓN
sábado, 1 de diciembre de 2007
HE VUELTO!!!! MUAJAJAJA!!!
-Dinámica de juegos.
-Leyendas
Si.... se que para dos cosas no hace falta una lista xDDD pero en esta vida hay que joderse....en fin...
"Primeramente": Como las hormigas han decidido recomenzar a tomar mi casa me he visto obligado a responder con una ofensiva táctica.... así que tras hacer un mapa de mi hogar ^^ (para el cual no necesito mucho lápiz ni a escala 1/1 xDD) he comenzado a desarrollar un sistema de defensa de las provisiones de la cocina (o sector de silos en mi mapa) y captura a un individuo en el baño (o sector B) que me guió hasta una de sus salidas.... donde usamos PV (un "pape" "empapao" en veneno) para taponarla acabando asi con un comboy de reconocimiento hormiguil.... así que puse una nuez en el centro del salón por la noche a las 10:00p.m. y a las 3 a.m. una patrulla de hormigas había llegado... tras interrumpir sus comunicaciones (otro pañuelo de similares características en medio de a fila) seguí a las que regresaban hasta e "butreque" del que salían... y lo neutralicé (mas de o mismo) así pues ahora he descubierto que llegaban desde fuera por la ventana... no he vuelto a avista movimiento de tropas por mi casa... así pues estoy conforme con la rápida intervención del servicio de inteligencia de la república independiente de mi casa (yo^^) .
Tras contaros un poco lo emocionante que es ser yo.... os dejare a la espera de la dinámica de juegos y unos relatos que voy a presentar a un "concursucho" y que después publicare (para que no halla plagios (aunque hay q tener mal gusto para plagiármelos xD). Que el cielo no se caiga sobre vuestras cabezas y FIN DE LA TRANSMISIÓN.
sábado, 17 de noviembre de 2007
¿Por qué lo han inventado? ¡¡¿¿POR QUÉÉÉ??!!
Pero encontré una serie de aparatos que llamaron mi atención... una mini-aspiradora USB para el polvo del teclado, un termómetro USB para la casa, unas memorias USB perfumadas!o.O...
El caso es que os recomiendo esta pagina de inventos absurdos y algunas otras que hay por la red, aunque mi favorita la han cerrado...
Me parece curioso e inútil este peine para calvos xD y este sofá pared es muyyy bueno.
del Vale.... aquí lo dejo.... siempre se puede abrir la pagina en una pestaña nueva y así tener la músicamenú de youtube de la parte baja del blog de fondo mientras la curioseáis en busca de inventos absurdos ^^.... como no tengo tiempo este fin de semana "gracias" a 3 exámenes de peso.... esto es todo.... que el cielo no se caiga sobre vuestras cabezas y FIN DE LA TRANSMISIÓN.
miércoles, 14 de noviembre de 2007
Nada nuevo
Os recomiendo Bard song de blind guardian y La musa y el espiritu de Saurom y me despido. Que el cielo no se ciga sobre vuestra cabeza. FIN DE LA TRANSMISIÓN.
Bueno.... una ultima cosa... esta imagen que acabo de hacer mientras escribia xDDDD (haced click en ella para aumentarla) no la entiendo ni yo... pero he decidido llamarla:
lunes, 12 de noviembre de 2007
La desinformación
Como dice este fragmento extraído de www.boulesis.com " El problema es que hoy no queda periódico, radio o televisión que esté dispuesto a informar, a contarnos lo que pasa. Por lo que se ve Vocento, Prisa o el Grupo Planeta (por nombrar grandes grupos, y no medios igualmente “comprometidos” como la Cope) deben pensar que los ciudadanos somos estúpidos. Es verdad que han bajado los niveles educativos, pero habría que decir a estos señores que somos capaces de pensar por nosotros mismos, de formarnos opiniones y juicios. Leer y escuchar sabemos. Analizar también. La madurez y la autonomía que el sistema democrático presupone a los individuos es despreciada y ridiculizada por medios de comunicación que no informan, sino que dan su versión de los hechos. Es vergonzante y lamentable ver cómo dan descaradamente un punto de vista interesado, partidista, de manera que ninguno de nosotros puede saber ya qué es lo que ha pasado realmente, sino que tenemos que adivinarlo filtrando (en la medida de nuestras posibilidades) lo que se nos cuenta"
Nadie nos informa, todos nos forman la opinión. Los medios de comunicación ofrecen hoy un dudoso servicio a la sociedad y nadie está libre de pecado en este sentido, NADIE.
La preocupante acumulación de intereses ha asesinado a la información.
domingo, 11 de noviembre de 2007
Psicografología, percepción, manias persecutorias
La Psicografología es el estudio de la personalidad a través de la escritura. A través de un estudio grafológico, podemos conocer aspectos de una persona, que muchas veces, ni ella misma sabe. Este estudio se realiza tanto en adultos como en niños y adolescentes, y sirve, en estos últimos dos casos, para ayudar a formar, para orientar y por sobre todo, para comprender el por qué de su comportamiento.La forma en que se escribe nos muestra la manera de desenvolverse en sociedad, en cambio la firma, nos da una clara imagen de cómo es la persona realmente.
Desgraciadamente la psicografología no puede decirnos si una persona es capaz de matar o si lo ha hecho pero es un campo que avanza mucho. Es increíble los datos que son capaces de extraer de una simple firma, eso si, algunos un poco ambiguos.
Las letras se dividen en el cuerpo, la parte de arriba que es representativa de la mente y la parte de debajo lo terrenal e instintivo. A mi me parece una ciencia curiosa y busco cosillas por ahi ^^.
¿Que quiero decir con la percepción? Bueno, pues por ejemplo... ¿No os habéis preguntado nunca como ven los colores los demás? No me refiero a los daltónicos, no. Me refiero a todos... ¿Como saber que el color que yo veo como verde no es distinto al que ven los demás aunque todos le demos las mismas connotaciones? es algo que yo siempre me he preguntado pero nunca halle repuesta... incluso intente inventar sistemas informáticos que lean impulsos eléctricos del cerebro, pero es demasiado paranoico xD. En caso de que todos veamos distintos los colores.. ¿no puede influir mucho esto en el carácter de cada uno? si yo viese mi verde como mi rojo... me volvería loco en un campo.
Las manías persecutorias son algo, yo creo, mas común de lo que parece si bien no en grados de teorías conspiratorias... todos alguna vez creemos que alguien nos mira por algo, que tras un espejo hay algo, que unas risas se dirigen a nosotros.... incluso hemos dejado de pensar algo al pasar junto a alguien por si las moscas... yo creo que esto es porque no somos capaces de imaginar que es lo que pasa en el mundo cuando no estamos... como eso de: "¿suena un árbol si se cae en el bosque cuando no hay nadie para escucharlo?" pues es lo mismo en mi opinión...
me gustaría que opinaseis en los comentarios sobre cualquiera de las tres cosas ^^. Que el cielo no se caiga sobre vuestras cabezas!! FIN DE LA TRANSMISIÓN.
miércoles, 7 de noviembre de 2007
Aegri somnia
Hola!!! que de tiempo... es por los estudios.... pero he vuelto!!! wojojo!!!(risa maligna...ejem..¬¬) bueno voy a poner un relato MIO acompañado de una imagen MIA(con el paint xD) ^^.
Cuando me desperté dos caminos había ante mi, uno era mas abrupto y el otro era llano.
Opte por coger el camino mas fácil y llegue a una gran puerta donde había un cartel que no pude entender excepto por la palabra sueños, pensé que debía ser el mundo de los sueños y que aquella figura seria el guardián.
El mas viejo mundo se abría ante mis pies...
El mas viejo de los guardianes me cedió la entrada...
Sentí miedo, miedo de no volver nunca a este imperfecto mundo, pero entre...
El guardián cerro la puerta detrás de mi y comencé ha bajar las escaleras. Cuando llegue al gran salón me recibió en audiencia el consejo onírico y se me encargo la misión...
No me lo podía creer al principio, pero si es lo que he de hacer no dudare en llevarlo a cabo, pues he de ganarme un sitio en el mundo de los sueños...
Al salir de nuevo, el guardián me entrego un saco con arena y me condujo de vuelta al mundo que conocí una vez, a través de un lago... hacia frió.
Cuando llegue a lo que una vez fue mi casa nadie me veía, nadie me prestaba atención. Me dirigí sin dudar a mi objetivo... era mi misión, no dudaba. Subí al avión y me senté cerca de la entrada, una niña se sentó a mi lado y se estremeció... decidí comenzar con mi misión y saque el saco de debajo de mis ropas. Me dispuse a esparcir aquella arena a todos los pasajeros y a la tripulación, pero al abrir el saco la arena cobro forma de serpiente alada y voló hasta la cabina donde comienzo a estrangular al piloto. Bueno, no es lo que esperaba, pero es a esto a lo que había venido, no debía privar a estas personas de conocer el mundo de los sueños, ni quería privarmelo a mi, entonces unos hombres con largos trajes negros aparecieron, me agarraron y quemaron con una extraña luz a la serpiente... yo grite que me dejasen culminar mi trabajo, que quería ganarme un puesto en el mundo de los sueños. Los hombres me ignoraron tanto como los demás ocupantes del avión, pero me agarraban con fuerza. Entonces aparecí aquí, ante este tribunal.. el resto ya lo saben.
- Señor Solanas... espero que comprenda que esta siendo acusado de intentar desequilibrar la frágil balanza entre la vida y la muerte... este tribunal no va a dejar impune tal acción aunque asegure usted que ha sido víctima de un engaño.
-Pero yo...!!
-¡¡ Silencio alma perdida!! !! Seras condenado a 100 años de purgatorio!!, pero en consagración a que su vida también le fue arrebatada antes de tiempo... sera deportado a la tierra hasta culminar su vida...
-¿y eso es todo lo que recuerda señor Solanas?... fue Ud. traído a este psiquiátrico hace ya 10 años y cada vez que le entrevisto me cuenta la misma historia... no hay mejoras en su estado... nada ha cambiado desde entonces...
-Algo si ha cambiado... ellos han vuelto a comunicarse conmigo, me han dicho que aun puedo entrar en el mundo de los sueños...
-¿Como ha conseguido ese cuchillo Solanas?¡¡ enfermeros, abrid la puerta!!, !!arrgghh...!!
Señor solanas... le hemos convocado aquí hoy, tras el final de su vida... para comunicarle que le sera negada la entrada al mundo de los vivos nunca mas, por consiguiente permanecerá en el purgatorio hasta nuevo aviso.
Firmado: Radamantis, Éaco y Minos, Excelentísimos jueces de los muertos por la gloria de los dioses.
FIN
viernes, 2 de noviembre de 2007
Un comentario que no pega mucho con mi estilo...
"Primero se llevaron a los negros, y no me importo porque yo no lo era... enseguida se llevaron a los judíos, pero a mi no me importo porque yo no lo era... después detuvieron a los curas, pero como yo no soy religioso tampoco me importo... después detuvieron a unos comunistas pero como yo no soy comunista tampoco me importo... ahora me llevan a mi... pero ya es tarde."
Vídeo extraído de "mediateca.educa.madrid.org"
A comentar... !!!venga!!! el proximo sera mas friki xD
jueves, 1 de noviembre de 2007
Un combo!
Pasemos a otra cosa... y esque mientras escribía he visto dos anuncios en la TV... el primero de una crema que oxigena la piel para rejuvenecerla... ¡¡Y el segundo de una crema que elimina el oxigeno de la piel para que no envejezca!! ¿pero que coño...? ¡¡¡joder!!! si una me lo da y la otra me lo quita... ¿no me pongo ninguna y tengo el mismo resultado no? me gustaría saber quienes son los genios que....medre mía...
Que le vamos a hacer... voy a poner unos vídeos de chistes de Loquendo xDDD
lunes, 29 de octubre de 2007
Halloween
Muchas personas celebran Halloween...pero muchos no tienen ni idea de que es esto(en parte porque no se molestan en averiguarlo.
Permitidme que arroje algo de luz sobre vuestras resacosas cabezas.
Halloween es una abreviación de noche de la víspera del día de los santos (All Hallow's Eve). Halloween se origino en la cultura Celta en Irlanda, Inglaterra y Francia, y aunque ahora se conoce como típica fiesta americana (y con esto quiero decir EE.UU.,(si no lo escribes abreviado te visitaran por la noche los espíritus de sus manipulados y de inteligencia distraida presidentes... incluido George Walker B.U.S.H.(el vivo)) pues el resto de América es un mundo aparte, uno que todo el mundo olvida al pronunciar América.) en realidad se exporto allí por los emigrantes irlandeses.Pero lo que aquí interesa es el por que de dicha celebración...:NO es como se cree recordando a unas brujas que llamaban de puerta en puerta pidiendo niños para comer...NO. La historia del Halloween se remonta a hace más de 2.500 años, cuando el año celta terminaba al final del verano, el preciso día 31 de octubre de nuestro calendario. El ganado era llevado de los prados a los establos. Ese último día, se suponía que los espíritus podían salir de los cementerios y apoderarse de los cuerpos de los vivos para resucitar. Para evitarlo, los poblados celtas ensuciaban las casas y las "decoraban" con huesos, calaveras y demás cosas desagradables de forma que los muertos pasaran de largo asustados, de ahí viene la tradición de decorar con motivos siniestros las casas en la actual víspera de todos los santos y también los disfraces. Según la tradición celta, los muertos regresaban en la noche de Samhain a pedir alimentos a los asustados habitantes, a quienes maldecían y hacían víctimas de conjuros si no accedían a sus peticiones (o me das o te hago una travesura, que es la traducción de "Trick or Treat").Es, así pues, una fiesta asociada a la venida de los dioses paganos a la vida.Halloween es una fiesta basada en el miedo, la muerte, los muertos vivientes, la magia negra y los monstruos místicos.Los entes que se suelen asociar a Halloween incluyen a los fantasmas, las brujas, los gatos negros, los trasgos, los banshees, los zombis y los demonios.Los celtas solían disfrazarse con pieles de animales el 31 de octubre y así no ser descubiertos por los espíritus que, según ellos, esa noche recobraban vida. De ahí la costumbre actual de disfrazarse ese día.Los colores tradicionales de Halloween son el negro de la noche y el naranja de las primeras luces del día. Los símbolos de Halloween también incluyen elementos otoñales como las calabazas y los espantapájaros.Se dice que las brujas utilizaban los cráneos de las víctimas humanas y las adornaban con velas entre las cuencas de los ojos y la nariz. Cuando los paganos irlandeses llegaron a Estados Unidos, no podían llevar a cabo estas prácticas con cráneos humanos, de modo que utilizaron calabazas.La celebración del día de Halloween ha sido integrada en casi todas las culturas no anglosajonas, pero, casi desplazando los ancestrales ritos del Día de Muertos.A mi no me gusta nada que todo el mundo se apunte a una fiesta sin saber ni lo que celebra, yo no celebro halloween porque no son mis creencias ni mi cultura... y porque para hacer una fiesta no hace falta un motivo,todos los días son buenos, si quieres juerga pues te vas de juerga( y a mi me parece genial), pero no me pongas de excusa que es halloween, reconoce que eso a ti te da igual... por supuesto esto no va dirigido a los que compartan creencias con los celtas o cultura con los anglosajones...adiós, y que el cielo no se caiga sobre vuestra cabeza...
miércoles, 24 de octubre de 2007
Solo es una actualización mas...
e lo que llena nuestro corazón rebosará nuestra boca.
Bueno, voy a poner también unos vídeos del youtube ^^ porque soy así de generoso(los 4 primeros son de música pero son o buenos aunque la música no te guste, o cachondos ^^).
Mr.Sandman (Blind Guardian)
The Bard's song (Blind Guardian)
Warcraft III (musica de Blind Guardian ^^)
Héroes del silencio (aprovechando que ahora salen en todas partes otra vez xD)
Tony vs. Paul (stop-motion)
Volvere!!! muajaja!!!(risa maligna ¬¬U)que el cielo no se caiga sobre vuestra cabeza. FIN DE LA TRANSMISIÓN.
martes, 23 de octubre de 2007
NO HE ABANDONADO!!! ù.ú...
Hace algunos meses que, visitando la célebre abadía de Fitero, y ocupándome en revolver algunos volúmenes de su abandonada biblioteca, descubrí en uno de sus rincones dos o tres cuadernos bastante antiguos, cubiertos de polvo y hasta comenzados a roer por los ratones.
Era un Miserere.
Yo no sé música; pero le tengo tanta afición que, aun sin entenderla, suelo coger a veces la partitura de una ópera y me paso las horas muertas hojeando sus páginas, mirando los grupos de notas más o menos apiñados, las rayas, los semicírculos, los triángulos y las especies de etcéteras que llaman llaves, y todo esto sin comprender una jota ni sacar maldito el provecho.
Consecuente con mi manía, repasé los cuadernos, y lo primero que me llamó la atención fue que, aunque en la última página había una palabra latina, tan vulgar en todas las obras, finis, la verdad era que el Miserere no estaba terminado, porque la música no alcanzaba sino hasta el décimo versículo.
Esto fue, sin duda, lo que me llamó la atención primeramente; pero luego que me fijé un poco en las hojas de música, me chocó más aún el observar que en vez de esas palabras italianas que ponen en todas, como maestoso, allegro, ritardando, piú vivo, a piacere, había unos renglones escritos con letra muy menuda y en alemán, de los cuales algunos servían para advertir cosas tan difíciles de hacer como esto: Crujen..., crujen los huesos, y de sus médulas ha de parecer que salen los alaridos; o esta otra: La cuerda aúlla sin discordar, el metal atruena sin ensordecer; por eso suena todo y no se confunde nada, y todo es la Humanidad que solloza y gime; o la más original de todas, sin duda, recomendada al pie del último versículo: Las notas son huesos cubiertos de carne; lumbre inextinguible, los cielos y su armonía..., fuerza:..., fuerza y dulzura.
-¿Sabéis qué es esto? -pregunté a un viejecito que me acompañaba, al acabar de medio traducir estos renglones, que parecían frases escritas por un loco.
El anciano me contó entonces la leyenda que voy a referiros.
Hace ya muchos años, en una noche lluviosa y oscura, llegó a la puerta claustral de esta abadía un romero y pidió un poco de lumbre para secar sus ropas, un pedazo de pan con que satisfacer su hambre y un albergue cualquiera donde esperar la mañana y proseguir con la luz del sol su camino.
Su modesta colación, su pobre lecho y su encendido hogar puso el hermano a quien se hizo esta demanda a disposición del caminante, al cual, después que se hubo repuesto de su cansancio, interrogó acerca del objeto de su romería y del punto adonde se encaminaba.
-Yo soy músico -respondió el interpelado-. He nacido muy lejos de aquí, y en mi patria gocé un día de gran renombre. En mi juventud hice de mi arte un arma poderosa de seducción y encendí con él pasiones que me arrastraron a un crimen. En mi vejez quiero convertir al bien las facultades que he empleado para el mal, redimiéndome por donde mismo pude condenarme.
Como las enigmáticas palabras del desconocido no pareciesen del todo claras al hermano lego, en quien ya comenzaba la curiosidad a despertarse, e instigado por ésta continuara en sus preguntas, su interlocutor prosiguió de este modo:
-Lloraba yo en el fondo de mi alma la culpa que había cometido; mas al intentar pedir a Dios misericordia no encontraba palabras para expresar dignamente mi arrepentimiento, cuando un día se fijaron mis ojos por casualidad sobre un libro santo. Abrí aquel libro, y en una de, sus páginas encontré un gigante grito de contrición verdadera, un salmo de David, el que comienza: Miserere mei, Deus! Desde el instante en que hube leído sus estrofas, mi único pensamiento fue hallar una forma musical tan magnífica, tan sublime, que bastase a contener el grandioso himno de dolor del Rey Profeta. Aún no la he encontrado; pero si logro expresar lo que siento en mi corazón, lo que oigo confusamente en mi cabeza, estoy seguro de hacer un Miserere tal y tan maravilloso, que no hayan oído otro semejante los nacidos; tal y tan desgarrador, que al escuchar el primer acorde los arcángeles dirán conmigo, cubiertos los ojos de lágrimas y dirigiéndose al Señor: ¡Misericordia!, y el Señor la tendrá de su pobre criatura.
El romero al llegar a este punto de su narración calló por un instante, y después, exhalando un suspiro, tornó a coger el hilo de su discurso. El hermano lego, algunos dependientes de la abadía y dos o tres pastores de la granja de los frailes que formaban un círculo alrededor del hogar, escuchaban en un profundo silencio.
-Después -continuó- de recorrer toda Alemania, toda Italia y la mayor parte de este país clásico para la música religiosa, aún no he oído un Miserere en que pueda inspirarme, ni uno, ni uno, y he oído tantos, que puedo decir que los he oído todos.
-¿Todos? -dijo entonces, interrumpiéndole, uno de los rabadanes-. ¿A que no habéis oído aún el Miserere de la Montaña?
-¿El Miserere de la Montaña? -exclamó el músico con aire de extrañeza-. ¿Qué Miserere es ese?.
-¿No dije? -murmuró el campesino, y luego prosiguió con una entonación misteriosa-: Ese Miserere, que sólo oyen por casualidad los que, como yo, andan día y noche tras el ganado por entre breñas y peñascales, es toda una historia, una historia muy antigua, pero tan verdadera como, al parecer, increíble. Es el caso que en lo más fragoso de esas cordilleras de montañas que limitan el horizonte del valle, en el fondo del cual se halla la abadía, hubo hace ya muchos años, ¡qué digo muchos años!, muchos siglos, un monasterio famoso, monasterio que, a lo que parece, edificó a sus expensas un señor con los bienes que había de legar a su hijo, al cual desheredó al morir, en pena de sus maldades. Hasta aquí todo fue bueno; pero es el caso que este hijo, que por lo que se verá más adelante debió de ser de la piel del diablo, si no era el mismo diablo en persona, sabedor de que sus bienes estaban en poder de los religiosos y de que su castillo se había transformado en iglesia, reunió a unos cuantos bandoleros, camaradas suyos en la vida de perdición que emprendiera al abandonar la casa de sus padres, y una noche de Jueves Santo, en que los monjes se hallaban en el coro, y en el punto y hora en que iban a comenzar o habían comenzado el Miserere, pusieron fuego al monasterio, entraron a saco en la iglesia, y a éste quiero, a aquél no, se dice que no dejaron fraile con vida. Después de esta atrocidad se marcharon los bandidos, y su instigador con ellos, a donde no se sabe, a los profundos tal vez. Las llamas redujeron el monasterio a escombros; de la iglesia aun quedan en pie las ruinas sobre el cóncavo peñón de donde nace la cascada que, después de estrellarse de peña en peña, forma el riachuelo que viene a bañar los muros de esta abadía.
-Pero -interrumpió impaciente el músico- ¿y el Miserere?
-Aguardaos -continuó con gran sorna el rabadán- que todo irá por partes.
Dicho lo cual, siguió así su historia:
-Las gentes de los contornos se escandalizaron del crimen: de padres a hijos y de hijos a nietos se refirió con horror en las largas noches de velada; pero lo que mantiene más viva su memoria es que todos los años, tal noche como en la que se consumó, se ven brillar luces a través de las rotas ventanas de la iglesia; se oye como una especie de música extraña y unos cantos lúgubres y aterradores que se perciben a intervalos en las ráfagas del aire. Son los monjes, los cuales, muertos tal vez sin hallarse preparados para presentarse en el Tribunal de Dios limpios de toda culpa, vienen aún del purgatorio a impetrar su misericordia cantando el Miserere.
Los circunstantes se miraron unos a otros con muestras de incredulidad; sólo el romero, que parecía vivamente preocupado con la narración de la historia, preguntó con ansiedad al que la había referido:
-¿Y decís que ese portento se repite aún?
-Dentro de tres horas comenzará sin falta alguna, porque precisamente esta noche es la del Jueves Santo y acaban de dar las ocho en el reloj de la abadía.
-¿A qué distancia se encuentra el monasterio?
-A una legua y media escasa. Pero, ¿qué hacéis? ¿A dónde vais con una noche como ésta? ¡Estáis dejado de la mano de Dios! -exclamaron todos, al ver que el romero, levantándose de su escaño y tomando el bordón, abandonaba el hogar para dirigirse a la puerta.
-¿A dónde voy? A oir esa maravillosa música, a oír el grande, el verdadero Miserere, el Miserere de los que vuelven al mundo después de muertos y saben lo que es morir en el pecado.
Y esto diciendo, desapareció de la vista del espantado lego y de los no menos atónitos pastores.
El viento zumbaba y hacía crujir las puertas, como si una mano poderosa pugnase por arrancarlas de sus quicios; la lluvia caía en turbiones, azotando los vidrios de las ventanas, y de cuando en cuando la luz de un relámpago iluminaba por un instante todo el horizonte que desde ellas se descubría.
Pasado el primer momento de estupor:
-¡Está loco! -exclamó el lego.
-¡Está loco! -repitieron los pastores, y atizaron de nuevo la lumbre y se agruparon alrededor del hogar.
Después de una o dos horas de camino, el misterioso personaje que calificaron de loco en la abadía, remontando la corriente del riachuelo que le indicó el rabadán de la historia, llegó al punto en que se levantaban, negras e imponentes, las ruinas del monasterio.
La lluvia había cesado; las nubes flotaban en oscuras bandas, por entre cuyos jirones se deslizaba a veces un furtivo rayo de luz pálida y dudosa; y el aire, al azotar los fuertes machones y extenderse por los desiertos claustros, diríase que exhalaba gemidos. Sin embargo, nada sobrenatural, nada extraño venía a herir la imaginación. Al que había dormido más de una noche sin otro amparo que las ruinas de una torre abandonada o un castillo solitario: al que había arrostrado en su larga peregrinación cien y cien tormentas, todos aquellos ruidos le eran familiares.
Las gotas de agua que se filtraban por entre las grietas de los rotos arcos y caían sobre las losas con un rumor acompasado, como el de la péndola de un reloj; los gritos del búho, que graznaba refugiado bajo el nimbo de piedra de una imagen en pie aún en el hueco de un muro; el ruido de los reptiles, que, despiertos de su letargo por la tempestad, sacaban sus disformes cabezas de los agujeros donde duermen o se arrastran por entre los jaramagos y zarzales que crecían al pie del altar, entre las junturas de las lápidas sepulcrales que formaban el pavimento de la iglesia, todos estos extraños y misteriosos murmullos del campo, de la soledad y de la noche llegaban perceptibles al oído del romero, que sentado sobre la mutilada estatua de una tumba, aguardaba ansioso la hora en que debiera realizarse el prodigio.
Transcurrió tiempo y tiempo, y nada se percibió; aquellos mil confusos rumores seguían sonando y combinándose de mil maneras distintas, pero siempre los mismos. ¡Si me habrá engañado!, pensó el músico; pero en aquel instante se oyó un ruido nuevo, un ruido inexplicable en aquel lugar, como el que produce un reloj algunos segundos antes de sonar la hora: ruidos de ruedas que giran, de cuerdas que se dilatan, de maquinaria que se agita sordamente y se dispone a usar de su misteriosa vitalidad mecánica, y sonó una campanada..., dos..., tres...; hasta once.
En el derruido templo no había campana, ni reloj, ni torre ya siquiera.
Aún no había expirado, debilitándose de eco en eco la última campanada; todavía se escuchaba su vibración temblando en el aire, cuando los doseles de granito, que cobijaban las esculturas, las gradas de mármol de los altares, los sillares de las ojivas, los calados antepechos del coro, los festones de tréboles de las cornisas, los negros machones de los muros, el pavimento, las bóvedas, la iglesia entera comenzó a iluminarse espontáneamente, sin que se viese una antorcha, un cirio o una lámpara que derramase aquella insólita claridad.
Parecía como un esqueleto de cuyos huesos amarillos se desprende ese gas fosfórico que brilla y humea en la oscuridad con una luz azulada, inquieta y medrosa.
Todo pareció animarse, pero con ese movimiento galvánico que imprime a la muerte contracciones que parodian la vida, movimiento instantáneo, más horrible aún que la inercia del cadáver que agita con su desconocida fuerza. Las piedras se reunieron a las piedras; el ara, cuyos rotos fragmentos se veían antes esparcidos sin orden, se levantó intacta, como si acabase de dar en ella su último golpe de cincel el artífice, y al par del ara se levantaron las derribadas capillas, los rotos capiteles y las destrozadas e inmensas series de arcos que, cruzándose y enlazándose caprichosamente entre sí, formaron con sus columnas un laberinto de pórfido.
Una vez reedificado el templo, comenzó a oírse un acorde lejano que pudiera confundirse con el zumbido del aire, pero que era un conjuro de voces lejanas y graves que parecía salir del seno de la tierra e irse elevando poco a poco, haciéndose cada vez más perceptible.
El osado peregrino comenzaba a tener miedo; pero con su miedo luchaba aún su fanatismo por todo la desusado y maravilloso, y alentado por él dejó la tumba sobre que reposaba, se inclinó al borde del abismo por entre cuyas rocas saltaba el torrente, despeñándose con un trueno incesante y espantoso, y sus cabellos se erizaron de horror.
Mal envueltos en los jirones de sus hábitos, caladas las capuchas, bajo los pliegues de las cuales contrastaban con sus descarnadas mandíbulas y los blancos dientes las oscuras cavidades de los ojos de sus calaveras, vio los esqueletos de los monjes, que fueron arrojados desde el pretil de la iglesia a aquel precipicio, salir del fondo de las aguas y, agarrándose con los largos dedos de sus manos de hueso a las grietas de las peñas, trepar por ellas hasta tocar el borde, diciendo con voz baja y sepulcral, pero con una desgarradora expresión de dolor, el primer versículo del salmo de David:
-Miserere mei, Deus, secundum magnam misericordiam tuam!
Cuando los monjes llegaron al peristilo del templo, se ordenaron en dos hileras y, penetrando en él, fueron a arrodillarse en el coro, donde, con voz más levantada y solemne, prosiguieron entonando los versículos del salmo. La música sonaba al compás de sus voces: aquella música era el rumor distante del trueno, que, desvanecida la tempestad, se alejaba murmurando; era el zumbido del aire que gemía en la concavidad del monte; era el monótono ruido de la cascada que caía sobre las rocas, y la gota de agua que se filtraba, y el grito del búho escondido, y el roce de los reptiles inquietos. Todo esto era la música y algo más que no puede explicarse ni apenas concebirse; algo más que parecía como el eco de un órgano que acompañaba los versículos del gigante himno de contrición del rey salmista con notas y acordes tan gigantes como sus palabras terribles.
Siguió la ceremonia; el músico, que la presenciaba absorto y aterrado, creía estar fuera del mundo real, vivir en esa región fantástica del sueño, en que todas las cosas se revisten de formas extrañas y fenomenales.
Un sacudimiento terrible vino a sacarlo de aquel estupor que embargaba todas las facultades de su espíritu. Sus nervios saltaron al impulso de una conmoción fuertísima, sus dientes chocaron, agitándose con un temblor imposible de reprimir, y el frío penetró hasta la médula de los huesos.
Los monjes pronunciaban en aquel instante estas espantosas palabras del Miserere:
-In iniquitatibus conceptus sum: et in peccatis concepit me mater mea.
Al resonar este versículo y dilatarse sus ecos retumbando de bóveda en bóveda, se levantó un alarido tremendo que parecía un grito de dolor arrancado a la Humanidad entera por la conciencia de sus maldades; un grito horroroso, formado por todos los lamentos del infortunio, de todos los aullidos de la desesperación, de todas las blasfemias de la impiedad; concierto monstruoso, digno intérprete de los que viven en el pecado y fueron concebidos en la iniquidad.
Prosiguió el canto, ora tristísimo y profundo, ora semejante a un rayo de sol que rompe la nube oscura de una tempestad, haciendo suceder a un relámpago de tenor otro relámpago de júbilo, hasta que, merced a una transformación súbita, la iglesia resplandeció bañada en luz celeste; las osamentas de los monjes se vistieron de sus carnes; una aureola luminosa brilló en derredor de sus frentes; se rompió la cúpula, y a través de ella se vio el cielo como un océano de lumbre abierto a la mirada de los justos.
Los serafines, los arcángeles y los ángeles y las jerarquías acompañaban con un himno de gloria este versículo, que subía entonces al trono del Señor como una tromba armónica, como una gigantesca espiral de sonoro incienso:
-Auditui meo dabis gaudium et laetitiam: et exultabunt ossa humiliata.
En este punto, la claridad deslumbradora cegó los ojos del romero, sus sienes latieron con violencia, zumbaron sus oídos y cayó sin conocimiento por tierra, y no oyó más...
Al día siguiente, los pacíficos monjes de la abadía de Fitero, a quienes el hermano lego había dado cuenta de la extraña visita de la noche anterior, vieron entrar por las puertas, pálido y como fuera de sí, al desconocido romero.
-¿Oísteis, al cabo, el Miserere? -le preguntó con cierta mezcla de ironía el lego, lanzando a hurtadillas una mirada de inteligencia a sus superiores.
-Sí respondió el músico.
-¿Y qué tal os ha parecido?
-Lo voy a escribir. Dadme un asilo en vuestra casa -prosiguió, dirigiéndose al abad-, un asilo y pan para algunos meses, y voy a dejaros una obra inmortal del arte, un Miserere que borre mis culpas a los ojos de Dios, eternice mi memoria y eternice con ella la de esta abadía.
Los monjes, por curiosidad, aconsejaron al abad que accediese a su demanda. El abad, por compasión, aun creyéndole un loco, accedió, al fin, a ello y el músico, instalado ya en el monasterio, comenzó su obra.
Noche y día trabajaba con un afán incesante. En mitad de su tarea se paraba y parecía como escuchar algo que sonaba en su imaginación, y se dilataban sus pupilas, saltaba en el asiento y exclamaba:
-¡Eso es; así, así, no hay duda..., así! -y proseguía escribiendo notas con una rapidez febril, que dio en más de una ocasión que admirar a los que lo observaban sin ser vistos.
Escribió los primeros versículos y los siguientes hasta la mitad del salmo; pero al llegar al último que había oído en la montaña le fue imposible proseguir.
Escribió uno, dos, cien, doscientos borradores: todo inútil. Su música no se parecía a aquella música ya anotada, y el sueño huyó de sus párpados y perdió el apetito, y la fiebre se apoderó de su cabeza, y se volvió loco, y se murió, en fin, sin poder terminar el Miserere, que, como una losa extraña, guardaron los frailes a su muerte, y aún se conserva hoy en el archivo de la abadía.
...
Cuando el viejecito concluyó de contarme esta historia, no pude menos de volver otra vez los ojos al empolvado y antiguo manuscrito del Miserere, que aún estaba abierto sobre una de las mesas.
In peccatis concepit me mater mea...
Estas eran las palabras de la página que tenía ante mi vista, y que parecía mofarse de mí con sus notas, sus llaves y sus garabatos ininteligibles para los legos de la música.
Por haberlas podido leer hubiera dado un mundo:
¿Quién sabe si no será una locura?
(extraido de www.tinet.net)
lunes, 15 de octubre de 2007
La web rompe-cabezas
Esta es una curiosa pagina web que conocí hace ya algún tiempo... Es un juego de lógica que consiste en ir avanzando de numero. La verdad es que me tiene un poco frustrado... voy a ir poniendo las soluciones hasta donde haya llegado en este mismo articulo a si que no lo perdáis de vista si comenzáis a jugar ^^. De todas formas pondré un enlace directo en el menú de la derecha.
SOLUCIONES HASTA DONDE HE LLEGADO (selecciona con el puntero la linea correspondiente para desvelarla):
1->2.: "clica" sobre el 1 que aparece en pantalla.
2->3.: escribe directamente en la dirección de la pagina un 3 en lugar del 2
3->4.: escribe directamente en la direccion de la pagina IV en lugar del 3
4->5.: escribe directamente en la dirección de la pagina five en lugar de IV
5->6.: escribe directamente en la dirección de la pagina oooooo en lugar de five
6->7.: escribe directamente en la dirección de la pagina 111 en lugar de oooooo (es codigo binario)
7->8.: escribe directamente en la dirección de la pagina huit en lugar de 111 (es frances)
8->9.: escribe directamente en la dirección de la pagina enin en lugar de huit (esta al revés)
9->10.: escribe directamente en la dirección de la pagina TEN en lugar de enin (esta oculto exactamente igual que este texto... solo hay q seleccionarlo)
10->11.: abre un menú contextual en la pagina(botón derecho del ratón ¬¬) y "clica" ver código de fuente, ahí pone: pues copia e_l_e_v_e_n directamente en la dirección de la pagina en lugar de TEN
11->12.: escribe directamente en la dirección de la pagina tweelvee (dobla solo la "e" como en eeleeveen ^^) en lugar de e_l_e_v_e_n
12->13.: gracias a un consejo de mi amigo Arturo: "busca en wikipedia" me dijo... encontré que la "baker's dozen" o "long dozen" es igual a 13, así pues intente poner a_bakers_dozen y funciono (a la segunda, porque lo escribí mal ^^)
13->14.: este fue relativamente fácil, tras probar cientos de 14, lucky, puse en Google 13, unlucky y encontré esta típica frase inglesa al completo: 13, unlucky for some... como no se pueden poner espacios, el resultado es: for_some
14->14.: es fácil... es 196 es 14 al cuadrado... se ve fácil... así pues... el cuadrado de 15 es 225, así de simple
15->16.: es obvio no?.... código morse... la solución para los bagos... es:
..._.._-..-_-_._._-.
16->17.: un_ar_bymtheg significa uno y 15, asi pues... poner dos y quince: dau_ar_bymtheg
17->18.: lo encontre de casualidad... puse en el buscador: "1597 18" y al pasar el puntero por una pagina en la que ponia "Fibonacci Magic" pulse sin darme cuenta pero resulto ser la serie de Fibonacci (buscadlo si quereis saber de que va ¬¬, mancha de flojos) asi pues al 19 le correspondia 2584
18->19.: la pestaña se llama EIGHteen asi que pense que seria poner NINEteen pero no pasa nada... vuelve a la de EIGHteen que pasa T.T??!!!
Y hasta aquí he llegado por ahora ^^
viernes, 12 de octubre de 2007
Los honderos
Voy a hablar pues de los franco-tiradores del mundo antiguo: Los honderos.
Y los honderos que han destacado siempre han sido los honderos de las islas baleares. Han sido reclutado por ejércitos del mundo entero.
El hondero luchaba siempre en primera línea, como soldado de la infantería ligera y básicamente su función consistía en romper el orden defensivo del enemigo, junto con los arqueros, lanzando proyectiles que causaran el mayor desorden posible en las filas enemigas.En el campo de batalla se disponían separados 2 ó 3 metros entre ellos para poder manejar la honda sin obstaculizarse y el efecto de las descargas de los honderos en las formaciones enemigas era terrible, ya que los proyectiles arrojados, fueran de piedra o plomo, podían llegar a pesar medio kilo y destrozaban cualquier tipo de escudo o armadura de la época. No es difícil imaginar la devastación que causaban. Eran los franco-tiradores de la época.
Como formaban en primera línea, tenían que efectuar repliegues rápidos y ordenados hacia los flancos para dejar paso al resto del ejército que iniciaba la carga, una vez arrojados todos los proyectiles contra el adversario.Durante el combate se protegían con un escudo de piel de cabra y una jabalina endurecida al fuego. Empleaban tres hondas de diferente medida atadas a su cuerpo, seleccionando con mortal precisión aquella más adecuada a cada necesidad planteada por el combate.Si bien eran mercenarios que vendían sus servicios al mejor postor, generalmente cobraban en especies, sobretodo por cosas que no eran abundantes en las islas Baleares, fuera vino, aceite o mujeres.Su contribución a la Historia, no acabó con su apoyo a los cartagineses durante más de doscientos años, ya que cuando Roma clavó sus garras sobre las islas, Quinto Cecilio Metelo se las tuvo que ver con los ya conocidos (y temidos) honderos; de hecho, para recalar en las islas, los romanos tuvieron que acorazar sus embarcaciones, forrándolas de cuero, ya que los honderos hundían sus barcos disparando a la misma línea de flotación de la nave. Valga decir que tal fue el sufrimiento de las legiones romanas, que tardaron dos años enteros en someter las islas.Finalmente, tras el sometimiento de las Baleares, estos mercenarios pasaron a formar parte de las tropas auxiliares romanas y combatieron junto a Julio César en su conquista de la Galia.El fin de los honderos no fue, ni mucho menos, provocado por un ejército invasor. Fue justamente la estabilidad, el período de Pax Romana que se extendió dentro de los limes (fronteras) del imperio, que favoreció el comercio y la explotación ganadera y agrícola de nuevos productos como el aceite, el vino, el trigo así como la progresiva “romanización” de las islas sometidas, los que conformaron un nuevo estilo de vida en el que no tenía cabida la honda, convertida en instrumento de juegos de habilidad o en herramienta de los pastores, en manos de los cuales ha llegado hasta nuestros días. Os invito a buscar mas sobre este apasionante tema^^.
(la información ha sido extraída de www.historiaclasica.com)
jueves, 4 de octubre de 2007
El "bien"
Esta discusión ha sido inspirado en una clase de filosofia esta mañana...
Hablabamos de platón y de su teoria sobre que el ser humano es bueno por naturaleza y es la ignorancia de lo que esta bien lo que le lleba a hacer el mal.
Bueno, os invito a filosofar sobre el tema...Comenzare por dar mi opinión:
Yo creo que el ser humano es de esos pocos animales (o el unico) que al nacer no sabe practicamente nada, es neutral, pero el ser humano depende de la sociedad para vivir, y es por eso que intentara comportarse de forma adecuada para encajar en esa sociedad segun los criterios morales de la misma (dejando aparte anomalias mentales como psicopatas, asesinos en serie y demas). Asi si el individuo se cria en un ambiente social en el que el "crimen" es considerado algo normal, asi sera de adulto. Pero siempre puede ser reeducado antes de tener esos conceptos muy arraigados en su ser.
Tambien quiero decir que en mi opinion el bien no existe, solo la ausencia de mal (si, justo al contrario de aquella frase de Albert Einstein para dar explicacion a por que dios creo el mal), y creo esto porque soy capaz de describir el mal, pues un individuo lo considerará como algo perjudicial para el, pero no se describir el bien... solo se que algo esta bien cuando no es perjudicial, y, por tanto, no está mal. Asi llego a la conclusión de que el bien no existe, y que no es mas que algo que no perjudica a aquello que tomamos como referencia, es decir, la ausencia de mal. Se que puede parecer una pamplina... pues corregidme en forma de comentario. ^^
sábado, 29 de septiembre de 2007
La NO extinción de los dinosaurios
Esta discusión la ha inspirado un documental (no muy bueno) que vi hace ya algún tiempo y en el que se planteaba esta cuestión: ¿y si no hubiesen extinguido los dinosaurios?
Quiero saber vuestras opiniones... algunas de las teorías del documental fueron que los dinosaurios seguirían dominando la tierra ( y en eso estoy de acuerdo) pero en lo que no estoy de acuerdo es en una teoría según la cual humanos y dinosaurios humanoides competiríamos la tierra en hermandad... me parece un tanto absurdo, pues creo que los dinosaurios habrían seguido evolucionando pero sin abandonar la forma de dinosaurios. Ahora bien..¿existiriamos los humanos? ¿se habrían desarrollado tanto los mamíferos? ¿que nivel de inteligencia habrían alcanzado? los velocirraptor hubiesen sido probablemente los "amos del cotarro", esa es una teoría muy extendida porque se cree que eran los mas inteligentes y los que tenían un lenguage y organización mas complejos... como siempre digo en las discusiones "el articulo no es mas que la introducción, continua en los comentarios..." a si que a ver si comentáis..¬¬
Ejem... que dificil es encontrar tiempo..¬¬
También quiero dar las gracias a todos los participantes de la discusión de sony vs nintendo vs Microsoft y a todos los que habéis visitado el blog hasta ahora..
Y de que voy a hablar esta vez? bueno... me gustaría que también siguiese un poco ese esquema de discusión... ¿como seria la tierra si los dinosaurios no se hubiesen extinguido? ¿habría humanos? ¿como serian estos dinosaurios ahora?
bueno... a ver si mañana subo la discusión, voy a empezar a escribirla...
lunes, 24 de septiembre de 2007
Cuento folclórico ruso "El soldado y la muerte"(Alekandr Nikoalevich Afanasiev)
Un soldado, después de haber cumplido su servicio durante veinticinco años, pidió ser licenciado y se fue a correr mundo.
Anduvo algún tiempo, y se encontró a un pobre que le pidió limosna. El soldado tenía sólo tres galletas y dio una al mendigo, quedándose él con dos. Siguió su camino, y a poco tropezó con otro pobre que también le pidió limosna saludándolo humildemente. El soldado repartió con él su provisión, dándole una galleta y quedándose él con la última.
Llevaba andando un buen rato cuando se encontró a un tercer mendigo. Era un anciano de pelo blanco como la nieve, que también lo saludó humildemente pidiéndole limosna. El soldado sacó su última galleta y reflexionó así:
«Si le doy la galleta entera me quedaré sin provisiones; pero si le doy la mitad y encuentra a los otros dos pobres, al ver que a ellos les he dado una galleta entera a cada uno se podrá ofender. Será mejor que le dé la galleta entera; yo me podré pasar sin ella.»
Le dio su última galleta, quedándose sin provisiones. Entonces el anciano le preguntó:
-Dime, hijo mío, ¿qué deseas y qué necesitas?
-Dios te bendiga -le contestó el soldado-. ¿Qué quieres que te pida a ti, abuelito, si eres tan pobre que nada puedes ofrecerme?
-No hagas caso de mi miseria y dime lo que deseas; quizá pueda recompensarte por tu buen corazón.
-No necesito nada; pero si tienes una baraja, dámela como recuerdo tuyo.
El anciano sacó de su bolsillo una baraja y se la dio al soldado, diciendo:
-Tómala, y puedes estar seguro de que, juegues con quien juegues, siempre ganarás. Aquí tienes también una alforja; a quien encuentres en el camino, sea persona, sea animal o sea cosa, si la abres y dices: «Entra aquí», en seguida se meterá en ella.
-Muchas gracias -le dijo el soldado.
Y sin dar importancia a lo que el anciano le había dicho, tomó la baraja y la alforja y siguió su camino.
Después de andar bastante tiempo llegó a la orilla de un lago y vio en él tres gansos que estaban nadando. Se le ocurrió al soldado ensayar su alforja; la abrió y exclamó:
-¡Ea, gansos, entren aquí!
Apenas tuvo tiempo de pronunciar estas palabras cuando, con gran asombro suyo, los gansos volaron hacia él y entraron en la alforja. El soldado la ató, se la puso al hombro y siguió su camino.
Anduvo, anduvo y al fin llegó a una gran ciudad desconocida. Entró en una taberna y dijo al tabernero:
-Oye, toma este ganso y ásamelo para cenar; por este otro me darás pan y una buena copa de aguardiente, y este tercero te lo doy a ti en pago de tu trabajo.
Se sentó a la mesa y, una vez lista la cena, se puso a comer, bebiéndose el aguardiente y comiéndose el sabroso ganso. Conforme cenaba, se le ocurrió mirar por la ventana y vio cerca de la taberna un magnífico palacio que tenía rotos todos los cristales de las ventanas.
-Dime -preguntó al tabernero-, ¿qué palacio es ése y por qué se halla abandonado?
-Ya hace tiempo -le dijo éste- que nuestro zar hizo construir ese palacio, pero le fue imposible establecerse en él. Hace ya diez años que está abandonado, porque los diablos lo han tomado por residencia y echan de él a todo el que entra. Apenas llega la noche se reúnen allí a bailar, alborotar y jugar a los naipes.
El soldado, sin pararse a pensar en nada, se dirigió a palacio, se presentó ante el zar, y haciendo un saludo militar, le dijo así:
-¡Majestad! Perdóname mi audacia por venir a verte sin ser llamado. Quisiera que me dieses permiso para pasar una noche en tu palacio abandonado.
-¡Tú estás loco! Se han presentado ya muchos hombres audaces y valientes pidiéndome lo mismo; a todos les di permiso, pero ninguno de ellos ha vuelto vivo.
-El soldado ruso ni se ahoga en el agua ni se quema en el fuego -contestó el soldado-. He servido a Dios y al zar veinticinco años y no me he muerto. ¿Crees que ahora me voy a morir en una sola noche?
-Pero te advierto que siempre que ha entrado al anochecer un hombre vivo, a la mañana siguiente sólo se han encontrado los huesos -contestó el zar.
El soldado persistió en su deseo, rogando al zar que le diese permiso para pasar la noche en el palacio abandonado.
-Bueno -dijo al fin el zar-. Ve allí si quieres; pero no podrás decir que ignoras la muerte que te espera.
Se fue el soldado al palacio abandonado, y una vez allí se instaló en la gran sala, se quitó la mochila y el sable, puso la primera en un rincón y colgó el sable de un clavo. Se sentó a la mesa, sacó la tabaquera, llenó la pipa, la encendió y se puso a fumar tranquilamente.
A las doce de la noche acudieron, no se sabe de dónde, una cantidad tan grande de diablos que no era posible contarlos. Empezaron a gritar, a bailar y alborotar, armando una algarabía infernal.
-¡Hola, soldado! ¿Estás tú también aquí? -gritaron al ver a éste-. ¿Para qué has venido? ¿Acaso quieres jugar a los naipes con nosotros?
-¿Por qué no he de querer? -repuso el soldado-. Ahora que con una condición: hemos de jugar con mi baraja, porque no tengo fe en la de ustedes.
En seguida sacó su baraja y empezó a repartir las cartas. Jugaron un juego y el soldado ganó; la segunda vez ocurrió lo mismo. A pesar de todas las astucias que inventaban los diablos, perdieron todo el dinero que tenían, y el soldado iba recogiéndolo tranquilamente.
-Espera, amigo -le dijeron los diablos-; tenemos una reserva de cincuenta arrobas de plata y cuarenta de oro: vamos a jugar esa plata y ese oro.
Mandaron a un diablejo para que les trajese los sacos de la reserva y continuaron jugando. El soldado seguía ganando, y el pequeño diablejo, después de traer todos los sacos de plata, se cansó tanto que, con el aliento perdido, suplicó al viejo diablo calvo:
-Permíteme descansar un ratito.
-¡Nada de descanso, perezoso! ¡Tráenos en seguida los sacos de oro!
El diablejo, asustado, corrió a todo correr y siguió trayendo los sacos de oro, que pronto se amontonaron en un rincón. Pero el resultado fue el mismo: el soldado seguía ganando.
Los diablos, a quienes no agradaba separarse de su dinero, derribaron la mesa a patadas y atacaron al soldado, rugiendo a coro:
-Despedácenlo, despedácenlo.
Pero el soldado, sin turbarse, cogió su alforja, la abrió y preguntó:
-¿Saben qué es esto?
-Una alforja -le contestaron los diablos.
-¡Pues entren todos aquí!
Apenas pronunció estas palabras, todos los diablos en pelotón se precipitaron en la alforja, llenándola por completo, apretados unos a otros. El soldado la ató lo más fuerte posible con una cuerda, la colgó de la pared, y luego, echándose sobre los sacos de dinero, se durmió profundamente sin despertar hasta la mañana.
Muy temprano, el zar dijo a sus servidores:
-Vayan a ver lo que le ha sucedido al soldado, y si se ha muerto, recojan sus huesos.
Los servidores llegaron al palacio y vieron con asombro al soldado paseándose contentísimo por las salas fumando su pipa.
-¡Hola, amigo! Ya no esperábamos verte vivo. ¿Qué tal has pasado la noche? ¿Cómo te las has arreglado con los diablos?
-¡Valientes personajes son esos diablos! ¡Miren cuánto oro y cuánta plata les he ganado a los naipes!
Los servidores del zar se quedaron asombrados y no se atrevían a creer lo que veían sus ojos.
-Se han quedado todos con la boca abierta -siguió diciendo el soldado-. Envíenme pronto dos herreros y díganles que traigan con ellos el yunque y los martillos.
Cuando llegaron los herreros trayendo consigo el yunque y los martillos de batir, les dijo el soldado:
-Descuelguen esa alforja de la pared y den buenos golpes sobre ella.
Los herreros se pusieron a descolgar la alforja y hablaron entre ellos:
-¡Dios mío, cuánto pesa! ¡Parece como si estuviera llena de diablos!
Y éstos exclamaron desde dentro:
-Somos nosotros, queridos amigos.
Colocaron el yunque con la alforja encima y se pusieron a golpear sobre ella con los martillos como si estuviesen batiendo hierro. Los diablos, no pudiendo soportar el dolor, llenos de espanto, gritaron con todas sus fuerzas:
-¡Gracia, gracia, soldado! ¡Déjanos libres! ¡Nunca te olvidaremos y ningún diablo entrará jamás en este palacio ni se acercará a él en cien leguas a la redonda!
El soldado ordenó a los herreros que cesasen de golpear, y apenas desató la alforja los diablos echaron a correr sin siquiera mirar atrás; en un abrir y cerrar de ojos desaparecieron del palacio. Pero no todos tuvieron la suerte de escapar: el soldado detuvo, como prisionero en rehenes, a un diablo cojo que no pudo correr como los demás.
Cuando anunciaron al zar las hazañas del soldado, lo hizo venir a su presencia, lo alabó mucho y lo dejó vivir en palacio. Desde entonces el valiente soldado empezó a gozar de la vida, porque todo lo tenía en abundancia: los bolsillos rebosando dinero, el respeto y consideración de toda la gente, que cuando se lo encontraban le hacían reverencias respetuosas, y el cariño de su zar.
Se puso tan contento que quiso casarse. Buscó novia, celebraron la boda y, para colmo de bienes, obtuvo de Dios la gracia de tener un hijo al año de su matrimonio.
Poco tiempo después se puso enfermo el niño y nadie lograba curarlo. Cuantos médicos y curanderos lo visitaban no conseguían ninguna mejoría. Entonces el soldado se acordó del diablo cojo; trajo la alforja donde lo tenía encerrado y le preguntó:
-¿Estás vivo, Diablo?
-Sí, estoy vivo. ¿Qué deseas, señor mío?
-Se ha puesto enfermo mi hijo y no sé qué hacer con él. Quizá tú sepas cómo curarlo.
-Sí sé. Pero ante todo déjame salir de la alforja.
-¿Y si me engañas y te escapas?
El diablo cojo le juró que ni siquiera un momento había tenido esa idea, y el soldado, desatando la alforja, puso en libertad a su prisionero.
El diablo, recobrando su libertad, sacó un vaso de su bolsillo, lo llenó de agua de la fuente, lo colocó a la cabecera de la cama donde estaba tendido el niño enfermo y dijo al padre:
-Ven aquí, amigo, mira el agua.
El soldado miró el agua, y el diablo le preguntó:
-¿Qué ves?
-Veo la Muerte.
-¿Dónde se halla?
-A los pies de mi hijo.
-Está bien. Si está a los pies, quiere decir que el enfermo se curará. Si hubiese estado a la cabecera, se hubiese muerto sin remedio. Ahora toma el vaso y rocía al enfermo.
El soldado roció al niño con el agua, y al instante se le quitó la enfermedad.
-Gracias -dijo el soldado al diablo cojo, y le dejó libre, guardando sólo el vaso.
Desde aquel día se hizo curandero, dedicándose a curar a los boyardos y a los generales. No se tomaba más trabajo que el de mirar en el vaso, y en seguida podía decir con la mayor seguridad cuál de los enfermos moriría y cuál viviría.
Así transcurrieron unos cuantos años, cuando un día se puso enfermo el zar. Llamaron al soldado, y éste, llenando el vaso con agua de la fuente, lo colocó a la cabecera del lecho, miró el agua y vio con horror que la Muerte estaba, como un centinela, sentada a la cabecera del enfermo.
-¡Majestad! -le dijo el soldado-. Nadie podrá devolverte la salud. Sólo te quedan tres horas de vida.
Al oír estas palabras el zar se encolerizó y gritó con rabia:
-¿Cómo? Tú que has curado a mis boyardos y a mis generales, ¿no quieres curarme a mí, que soy tu soberano? ¿Acaso soy yo de peor casta o indigno de tu favor? Si no me curas daré orden para que te ejecuten una hora después de mi muerte.
El soldado se encontró perplejo ante este problema y se puso a suplicar a la Muerte, diciendo:
-Dale al zar la vida y toma en cambio la mía, porque si de todos modos he de perecer, prefiero morir por tu mano a ser ejecutado por la del verdugo.
Miró otra vez en el vaso y vio que la Muerte le hacía una señal de aprobación y se colocaba a los pies del zar.
El soldado roció al enfermo, y éste en seguida recobró la salud y se levantó de la cama.
-Oye, Muerte -dijo el soldado-, dame tres horas de plazo; necesito volver a casa para despedirme de mi mujer y de mi hijo.
-Está bien -contestó la Muerte.
El soldado se fue a su casa, se acostó y se puso muy enfermo. La Muerte no tardó en llegar y en colocarse a la cabecera de su cama, diciéndole:
-Despídete pronto de los tuyos, porque ya no te quedan más que tres minutos de vida.
El soldado extendió un brazo, descolgó de la pared la alforja, la abrió y preguntó:
-¿Qué es esto?
La Muerto le contestó:
-Una alforja.
-Es verdad; pues entra aquí.
Y la Muerte en un instante se encontró metida en la alforja.
El soldado sintió tan grande alivio que saltó de la cama, ató fuertemente la alforja, se la colgó al hombro y se encaminó a los espesos bosques de Briauskie. Llegó allí, colgó la alforja en la cima de un álamo y se volvió contento a su casa.
Desde entonces ya no se moría la gente. Nacían y nacían, pero ninguno se moría. Así transcurrieron muchos años, sin que el soldado descolgase la alforja del álamo.
Una vez que paseaba por la ciudad tropezó con una anciana tan vieja y decrépita, que se caía al suelo a cada soplo del viento.
-¡Dios de mi alma, qué vieja eres! -exclamó el soldado-. ¡Ya es tiempo de que te mueras!
-Sí, hijo mío -le contestó la anciana-. Cuando hiciste prisionera a la Muerte sólo me quedaba una hora de vida. Tengo gran deseo de descansar; pero ¿cómo he de hacer? Sin la muerte la tierra no me admite para que descanse en sus profundidades. Dios te castigará por ello, pues son muchos los seres humanos que están sufriendo como yo en este mundo por tu causa.
El soldado se quedó pensativo: «Se ve que es necesario libertar a la Muerte aunque me mate a mí -pensó-. ¡Soy un gran pecador!»
Se despidió de los suyos y se dirigió a los bosques de Briauskie. Llegó allí, se acercó al álamo y vio la alforja colgada en lo alto del árbol, balanceada por el viento.
-Oye, Muerte, ¿estás viva? -preguntó el soldado.
La Muerte le contestó con una voz apenas perceptible:
-Estoy viva, amigo.
El soldado descolgó la alforja, la desató y la abrió, dejando libre a la Muerte, a la que suplicó que lo matase lo más pronto posible para sufrir poco; pero la Muerte, sin hacerle caso, echó a correr y en un instante desapareció.
Y el soldado vivio largo tiempo gozando de gran felicidad... pero cansado ya de vivir, y de que todas las personas a las que queria le dejasen, fue caminando hasta el infierno, los diablos reconocieron el saco que portaba y no le dejaron entrar, asi que el les amenazo y estos accedienron a decirle donde quedaba el cielo, y a darle 50 almas.
El soldado llego al cielo y entrego las 50 almas a cambio de poder entrar, pero no le dejaron... Asi que el soldado dio el saco a una de las almas y le dijo:
-Recuerda que te he salvado, cuando estes dentro grita mi nombre y asi yo aparecere en el saco.
Pero como las almas al entrar en el cielo olvidan, olvido esta lo que el soldado le dijo... Y se cree que aun anda por el mundo el soldado...